Cáncer de origen primario desconocido: diagnóstico
¿Cómo se diagnostica el cáncer de origen primario desconocido?
El cáncer de origen primario desconocido (CUP, por su sigla en inglés) es un cáncer que se detecta cuando ya se propagó (hizo metástasis) a otra parte del cuerpo. Si el proveedor de atención médica cree que usted podría tener CUP, necesitará ciertos exámenes y pruebas para confirmarlo. Estas pruebas se usarán para tratar de encontrar el origen del cáncer. Este es el lugar donde se originó el cáncer.
El diagnóstico de CUP comienza cuando el proveedor le hace preguntas. Le preguntará acerca de su historia clínica, los síntomas, los factores de riesgo y si tiene antecedentes familiares de la enfermedad. También le realizarán una exploración física.
¿Qué pruebas podría necesitar?
Con estas pruebas, los proveedores de atención médica pueden obtener más información sobre el cáncer. Se usan para tratar de averiguar dónde se originó el cáncer (lo que se denomina localización primaria). También pueden mostrar dónde se ha extendido el cáncer en su cuerpo. Los resultados ayudan a los médicos a decidir la mejor forma de tratar el cáncer.
Las pruebas que le hagan dependerán de dónde se encuentre el CUP.
Es posible que le hagan una o más de estas pruebas para buscar el sitio primario y la diseminación del CUP:
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Análisis de orina y de sangre
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Pruebas de diagnóstico por imágenes
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Biopsia y pruebas de tejidos
Análisis de orina y de sangre
Algunos tipos de cáncer producen y liberan determinadas sustancias en la sangre y la orina. Estas sustancias se denominan marcadores tumorales. Si tiene determinados marcadores, el proveedor de atención médica podrá decirle qué tipo de cáncer tiene. Por ejemplo, si alguien tiene niveles altos de antígeno prostático específico (PSA) en la sangre, puede significar que el cáncer se inició en la glándula prostática.
En un hemograma completo (HC) y un análisis bioquímico de la sangre pueden detectarse signos relacionados con determinados tipos de cáncer. También dan una idea de su estado general de salud y del funcionamiento de sus órganos. Estas pruebas también pueden usarse para comprobar si el cáncer se ha propagado a los huesos o a la médula ósea.
Pruebas de diagnóstico por imágenes
Radiografías de tórax
Es posible que se haga una radiografía de tórax para detectar cambios en los pulmones. Puede indicar la presencia de un tumor en los pulmones o en el pecho. También puede mostrar un aumento de tamaño de los ganglios linfáticos del pecho. La radiografía dura unos minutos y no duele.
Tomografías computarizadas
Las tomografías computarizadas usan una serie de rayos X y una computadora para obtener imágenes tridimensionales detalladas del interior del cuerpo. Durante la prueba, usted permanece acostado sobre una mesa estrecha que se desliza dentro de un tomógrafo en forma de anillo. La tomografía computarizada no le produce dolor. Durante la exploración, puede que le pidan que contenga la respiración en algunos momentos.
Es posible que tenga que tomar un medio de contraste entre 4 y 6 horas antes de la exploración. El tinte ayuda a que determinadas partes del cuerpo se vean con más claridad. Pasará a través de su cuerpo y saldrá con las evacuaciones intestinales. También es posible que le introduzcan un tinte en la sangre a través de una vena. Cuando le inyecten el colorante, es posible que sienta una sensación de calor que se extiende por todo el cuerpo.
Dígale al proveedor de atención médica si alguna vez ha tenido alguna reacción al medio de contraste. Entre las reacciones, se incluyen urticaria, dificultad para respirar o acalorarse de forma repentina. Es posible que tenga que tomar medicamentos antes de la prueba para prevenir una reacción.
Tomografía por emisión de positrones (TEP)
Con la TEP se pueden detectar células cancerosas en todo el cuerpo. Para esta prueba se introduce en la sangre, a través de una vena del brazo o de la mano, una forma de azúcar (glucosa) ligeramente radiactiva. Esta prueba mostrará en qué parte del cuerpo se utiliza más la glucosa. Esto ayuda a encontrar células activas que se dividen rápidamente, como las cancerosas.
Permanecerá quieto sobre una mesa que se desliza dentro de los anillos del tomógrafo por emisión de positrones. Girará a su alrededor y tomará imágenes. Aparte de la inyección, la TEP es indolora. Algunas personas son sensibles al azúcar que se usa. Esto puede causar náuseas, dolor de cabeza o vómitos. Algunas máquinas más nuevas pueden hacer TEP y TC al mismo tiempo. De este modo, las zonas que aparecen en la TEP pueden compararse con las imágenes más detalladas de la tomografía computarizada.
Resonancia magnética
En la resonancia magnética se usan ondas de radio, imanes grandes y una computadora para generar imágenes detalladas de su interior. Mediante una resonancia magnética se puede saber si el cáncer se ha propagado a la columna vertebral o al cerebro.
Durante la prueba, permanecerá acostado en una mesa estrecha que se desliza dentro de un largo tomógrafo en forma de tubo. Si tiene claustrofobia, es posible que necesite un sedante antes de la prueba. La duración de la prueba puede ser de una hora o más. Una resonancia magnética es indolora, pero ruidosa. Es posible que le ofrezcan auriculares o tapones para los oídos.
Gammagrafías óseas
Las gammagrafías óseas usan un colorante radiactivo que se introduce en la sangre a través de una vena. El colorante viajará hasta sus huesos y los absorberá. Las células cancerosas del hueso absorben el colorante de forma diferente a las del hueso normal. Estas manchas pueden verse en la exploración.
Endoscopia
La endoscopia consiste en usar un tubo largo y estrecho con una luz y una cámara en el extremo para observar el interior del cuerpo. Esta sonda puede introducirse en una abertura natural del cuerpo, como la boca, para observar el estómago, las vías respiratorias o los pulmones. También puede introducirse a través del ano para examinar el recto y el colon.
Mamografía
Una mamografía es una radiografía que se hace para detectar tumores u otras alteraciones en las mamas. Puede usarse si se detecta cáncer en los ganglios linfáticos de la axila.
Biopsia
Una biopsia es una prueba en la que se extraen del cuerpo pequeños fragmentos de tejido, denominados muestras. Si se ha acumulado líquido donde no debería, como en el espacio que rodea el pulmón, también puede extraerse. Un patólogo examina el tejido o el líquido para detectar signos de cáncer. El aspecto de las células y los resultados de las pruebas de laboratorio pueden ayudar a los proveedores de atención médica a determinar el origen del cáncer. En algunos casos, los tintes especiales realizados en el tejido también pueden ayudar.
Durante una biopsia, el médico extrae muestras de tejido o líquido de zonas que podrían ser cancerosas, como ganglios linfáticos inflamados o tumores. Hay varios tipos de biopsias que se pueden usar. Muchas veces, una biopsia es la única forma de saber si una persona tiene cáncer. También es una parte importante para averiguar dónde empezó el cáncer.
Biopsia por aspiración con aguja fina
Se usa una aguja muy fina para extraer algo de líquido o una pequeña cantidad de tejido del tumor.
Biopsia con aguja gruesa
En esta prueba se puede extraer más tejido. La aguja es más ancha que la que se usa en un aspirado con aguja fina.
Paracentesis o toracocentesis
En la paracentesis se usa una aguja larga y fina para extraer líquido del abdomen. En la toracocentesis, se usa una aguja para extraer el líquido acumulado alrededor de los pulmones. Se puede usar la ecografía para guiar la aguja hasta el lugar correcto.
Aspirado/biopsia de la médula ósea
Se usa una aguja especial para extraer una pequeña cantidad de médula ósea líquida y espesa (aspirado) y un trozo de tejido óseo (biopsia). Normalmente se toma de la parte posterior del hueso de la pelvis.
Biopsia por escisión
En este caso, se extrae todo el tumor en una sola pieza. También pueden extirparse los ganglios linfáticos que pudieran contener cáncer.
Biopsia por incisión
En este tipo de biopsia solo se extrae una parte del tumor. Este método se usa si el tumor es tan grande que extirparlo entero puede causar problemas.
Pruebas de tejidos
Las muestras extraídas durante una biopsia se envían a un laboratorio para su análisis. Un patólogo es un proveedor de atención médica con formación adicional en la observación y análisis de tejidos para diagnosticar enfermedades como el cáncer. El patólogo usa muchos análisis de laboratorio diferentes para buscar signos de cáncer y averiguar dónde empezó. A veces, las muestras de tejido se tiñen con tintes especiales para detectar tumores. Estos incluyen sarcomas, melanomas y linfomas. Otros tintes ayudan a encontrar tumores o células que pueden proceder del testículo, la próstata, la mama, la glándula tiroides o el colon.
El patólogo también puede examinar la muestra con un microscopio electrónico. Esto puede mostrar más detalles que den pistas sobre en qué tipo de células empezó el cáncer.
También se harán pruebas moleculares. En estas pruebas se buscan determinados genes y cambios genéticos (mutaciones) en las células. Las diferentes mutaciones genéticas se relacionan con distintos tipos de cáncer.
También se pueden usar otras pruebas. Depende de los síntomas que presente y de los resultados de los análisis de laboratorio anteriores.
Obtención de los resultados de las pruebas
Cuando el proveedor de atención médica tenga los resultados de las pruebas y la biopsia, se contactará con usted. Pregunte cómo le comunicarán los resultados. ¿Será a través de una llamada telefónica o deberá programar una cita médica?
Si el origen del cáncer no puede determinarse después de muchas pruebas, es posible que le diagnostiquen un cáncer de origen primario desconocido. Un patólogo examinará las muestras de la biopsia. Entonces clasificará el cáncer como 1 de estos 5 tipos más comunes:
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Carcinoma de células escamosas
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Adenocarcinoma
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Carcinoma poco diferenciado
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Carcinoma neuroendocrino
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Neoplasia maligna poco diferenciada
Esta clasificación ayudará al proveedor a decidir un plan de tratamiento, incluso si se desconoce el sitio primario del cáncer.
Es posible que el proveedor repita la exploración física y algunas pruebas. También es posible que un segundo patólogo examine las muestras de la biopsia. A veces, con el paso del tiempo, un pequeño tumor primario oculto puede crecer lo suficiente como para que se lo encuentre. Esto puede ayudar a los proveedores a reclasificar el CUP y decidir cuál es el mejor tratamiento.
Colabore con el proveedor de atención médica
El proveedor hablará con usted acerca de las pruebas que tenga que hacerse. Asegúrese de seguir sus consejos a fin de prepararse para las pruebas. Haga preguntas para saber qué puede esperar y comente cualquier duda que tenga.